Tribulaciones en la crisis del virus (día 43)

Tribulaciones en la crisis del virus (día 43)

Decenas de miles de personas fallecidas. Y las que no se cuentan. Y las que no quieren que contemos.

Los muertos del sepulturero profanador y su compinche bolchevique.

Hace ya más de cuarenta días, o sea que ya hemos pasado «la cuarentena», buen momento para hacer un resumen de la situación.

Primero no pasaba nada. Todos a las manifas, a las orgías feminoides.

Después, que viene el bicho, todos a casa. El que salga se muere y yo lo meto en la cárcel. O ambas cosas.

Luego que aplaudamos mientras el gobierno dice una tontería tras otra.

Nos meten al compinche bolchevique como espía.

Nos confiscan el material sanitario.

Compran testes que no funcionan, mascarillas fake, pero pagando dinerales.

Nos monitorizan en las redes, dan caza al disidente, amenazan con gulags.

Prohíben el despido, arruinan a las empresas, a los autónomos y no ponen un duro.

Amenazan con quitarnos lo poco que nos queda.

Ocultan las cifras de fallecidos y, cuando nos enteramos, cambian todos los días la suma.

No tiene plan de «desconfinamiento», pero dejan salir a los niños, elevándolos a la categoría de perro. Bueno, algo menos, porque los niños solamente pueden salir una vez al día. Sigue habiendo clases.

Nos mienten todos los días.

Y aquí seguimos, aplaudiendo.

Aunque hoy he oído cacerolas. ¿Estaremos despertando?

Voy a ver aló presidente, que necesito mi dosis de soma semanal.

Y nos siguen muriendo.

Definición de imbécil de la RAE, que debería ser de obligada lectura antes de votar (aun sin que muchos la comprendan): Tonto o falto de inteligencia.

Definición de criminal, según la RAE, 4ª acepción: que ha cometido o procurado cometer un crimen.

Definición de secuestrar, según la RAE: retener indebidamente a una persona para exigir dinero por su rescate, o para otros fines.

Y deseamos, de corazón, la total y completa recuperación de cuantos aquí se citan.

P.d.: el (no) uso de las mayúsculas es, cómo no, deliberado.

Deja una respuesta